El gremio advirtió que se perderán 10.000 empleos luego de la decisión del Gobierno de oficializar la quita de los derechos de importación a las computadoras portátiles y accesorios informáticos.
La quita de aranceles a la importación de productos informáticos que aplicó el Gobierno agudizó las tensiones con los gremios de la industria. La UOM amenaza ahora con tomar todas las plantas en Tierra del Fuego, una medida de fuerza que el sindicato no aplica desde 1995.
"Si tenemos que tomar las plantas lo vamos a hacer", advirtió Ángel Gordillo, delegado de la UOM de Río Grande.
Según los datos propios del gremio, la provincia de Tierra del Fuego ya perdió 6.000 puestos de trabajo en 2016. Y ahora con esta medida del gobierno nacional temen que provoque otros 10.000 despidos.
"Esperamos que sea un error porque es una locura", enfatizó Gordillo y acusó al gobierno de neoliberal "porque va contra los puestos de trabajo".
Esta semana, el presidente de la empresa PC Arts Argentina, que controla la marca Banghó, Carlos Suaya, señaló que la reciente medida implicará la pérdida de 500 empleos solo en esa firma.
"(Banghó tenía) 800 empleados en tres plantas muy industrializadas", pero afirmó que se reconvertirá "a menos de la mitad cuando se termine todo el proceso, de 800 vamos a pasar a 300", alertó.
El Gobierno publicó a principio de semana el decreto 117 que establece la quita desde del arancel de 12% promedio para la importación de componentes para producir PC en el país, como también el arancel de 35% para el ingreso de notebooks, tablets y computadoras a partir del 1 de abril.
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