En horas del mediodía, una importante cantidad de trabajadores afiliados al sindicato de Camioneros se hizo presente en el Concejo Deliberante, impidiendo el normal funcionamiento e inicio de la sesión ordinaria.
Allí, tras copar las instalaciones, se hicieron sentir ante la preocupación sobre el futuro de los trabajadores de la firma Santa Elena luego de diversas versiones ante la municipalización o no de los servicios en el caso de que se apruebe la “Sociedad del Estado”.
Guillermo Vargas, secretario de Prensa del sindicato explicó que el contrato con la empresa Santa Elena finaliza en el año 2023 “y se genera incertidumbre, una empresa si no tiene el 100% de la recaudación para generar el pago de las cargas y lo sueldos, es complicado”.
Explicó que “Estamos peleando lo mismo de hace dos años, el único interés es la situación de los trabajadores que se han enterado por los medios y las redes sociales de todo esto”, haciendo referencia al proyecto Río Grande Activa Sociedad del Estado.
“Es un proyecto de lo que hay nada, no hay nada escrito. Lo único que nos importa es el futuro de los puestos laborales”.
Finalmente Vargas aseguró que no mantuvo contactos con el intendente electo Martín Pérez y que no tienen conocimiento del proyecto que se busca aprobar.